Así llegó al taller este sillón, estaba muy deteriorado. Su dueño quería un cambio total de la pieza para acoplarlo en el salón de su casa.
Se destapizó, se desinsectó y se masilló, se restauraron ciertos desperfectos que encontramos (un brazo suelto, una pata que se movía...)
Y una vez restaurado, comenzamos a hacer el cambio de imagen tal y como quería su dueño.
Pintada en negro matizado y muy decapada, especialmente en las patas.
Una vez acabada la pintura decorativa, realizamos el tapizado tradicional.
Nuestro cliente quería un tapizado muy abombado, totalmente diferente al que traía el sillón cuando entró en el taller.
Nuestro cliente nos trajo una tela del estilo a la tela de ojo de perdiz, así es que pensamos que unas rayas colchoneras quedarían bien. Estas las hicimos con pinturas de tela, pero dejando un aspecto como desgastado.
Por último rematamos todo el tapizado poniendo un vivo de la misma tela que sujetamos con tachitas de tapicería para dar un toque más original y juvenil a la pieza.
Ah!, por cierto, en el respaldo realizamos un pequeño abombamiento en la zona de los riñones, que se puede apreciar en estas imágenes.
El resultado lo podeis ver en estas imágenes.
Nuestro cliente quedó muy satisfecho, de hecho nos ha hecho varios encargos más, que poco a poco iré subiendo al blog.
Este trabajo ha sido realizado por Lucía y Ana.
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